Visitas administrativas realizadas por la Personería de Bogotá, D.C., en tres Estaciones de Policía, evidenciaron un riesgo latente de contagio de COVID-19.
Durante la inspección que tuvo lugar el 9 de enero, en las estaciones de policía de Ciudad Bolívar, Kennedy, Rafael Uribe Uribe, se estableció un alto nivel de hacinamiento.
En informe de la Personería Distrital, se registra en la estación de Policía de Kennedy, una ocupación de 189 personas, cuando su capacidad máxima es de 50. La misma situación se presenta en la estación Rafael Uribe Uribe, con una capacidad máxima de 56, y una ocupación de 111 personas. Mientras, que en la estación de Ciudad Bolívar se registra una ocupación actual de 175 personas, y su capacidad máxima es de 60.
“Encontramos en estas visitas condiciones inseguras, insalubres e infrahumanas. No existen espacios de distanciamiento social adecuado entre las personas. Un ejemplo es la estación de policía de Kennedy en donde encontramos que en dos celdas hay 189 personas”, manifestó el personero de Bogotá, Julián Pinilla Malagón.
Lo que más preocupa, de acuerdo al informe de la Personería, es que no se han realizado pruebas de COVID-19, pese al riesgo por el alto nivel de hacinamiento. Lo anterior, hace necesario tomar medidas precisas para hacer pruebas a la mayor parte de las personas que se encuentran en las estaciones, entre policías y los privados de la libertad.
De igual forma, en las tres estaciones de policía donde se adelantó la visita administrativa, se constató la falta de suministro y del uso de tapabocas, además de la ausencia de entrega de otros elementos de bioseguridad
“Encontramos que las personas privadas de la libertad no usan tapabocas al interior del espacio donde están detenidas. Conocimos que cada cuatro meses reciben aproximadamente 600 tapabocas, siendo una dotación insuficiente dada la emergencia sanitaria. Esta es una situación alarmante, el hacinamiento en las estaciones de policía es una bomba de tiempo que en cualquier momento puede expandir, aún más, el COVID 19 en la ciudad. Hago un llamado al Ministro de Justicia, al INPEC, a los secretarios de Seguridad y Gobierno, para que trabajen articuladamente con el fin de desarmar esta bomba”, finalizó el personero, Julián Pinilla Malagón.